Este libro ofrece una exploración profunda e inédita sobre cómo la religión moldeó la vida y la obra de J.R.R. Tolkien, uno de los escritores más emblemáticos del siglo XX. A través de un detallado estudio biográfico, Holly Ordway desentraña la compleja relación entre la fe personal de Tolkien y su creación literaria, especialmente en "El Señor de los Anillos", que el propio autor describió como una obra "fundamentalmente religiosa y católica". Este libro no solo presenta la evolución espiritual de Tolkien, desde su infancia bajo la influencia del catolicismo hasta los desafíos y confirmaciones de su fe durante las guerras y su vida adulta, sino que también muestra cómo estos elementos se entrelazan sutil y profundamente con los relatos de la Tierra Media.