San Francisco Javier controlaba con soltura el género epistolar. Sus más de 130 largas cartas conservadas de su puño y letra así lo demuestran. Se escribía con tipo de personalidades, compañeros jesuitas y colaboradores en la misión. Una documentación con un valor histórico valiosísimo. Pero aún más, permiten profundizar en el Javier más íntimo. Un hombre capaz de ofrecer claves muy interesantes para preguntarnos, entender y transformar hoy nuestra propia vida de fe. Este libro ofrece una selección de los pasajes más personales en los que Javier descubre su alma.