En otoño de 2017, el referéndum de independencia y la proclamación de la república catalana pusieron en jaque la Constitución. Pero sus consecuencias se extendieron mucho más allá del ámbito judicial. Este libro triste y esclarecedor repasa los efectos catastróficos que la sinrazón nacionalista ha tenido para Cataluña. Su autor, profesor de economía aplicada, desgrana el daño económico infligido por el separatismo, analizando la huida de empresas, de depósitos y bancos, la inestabilidad de las inversiones, la reducción del comercio con el resto de España, la corrupción política, la disminución del turismo y el empleo o la quiebra y rescate de la Generalitat. Pero es mucho más: en sus páginas, el lector no solo encontrará una radiografía precisa de la decadencia de Cataluña, también encontrará un emocionante alegato a favor de la democracia, el Estado de derecho y el valor de las instituciones. Y, sobre todo, hallará un arsenal de argumentos y datos sobre los costes del procés que echan por tierra el mito del paraíso de la Cataluña independiente. Una explicación minuciosa y razonada de los efectos que ya ha tenido el procés, pero también de las consecuencias que tendría para Cataluña la secesión, de sus riesgos políticos, logísticos o económicos, del impacto sobre el PIB, de la caída del comercio y de la ocupación o de la difícil posición internacional en la que quedaría. Brunet deja al desnudo, una a una, todas las mentiras y fantasías separatistas, y su conclusión es clara: la secesión abocaría a Cataluña a la ruina y a ser un estado fallido, vasallo de alguna potencia extranjera y totalitario. Una obra llamada a convertirse en la referencia absoluta sobre las consecuencias del procés y la decadencia de Cataluña.