Daniel inaugura su jubilación con cierta perplejidad, observa la vida con una segunda inocencia, sorprendido por disponer de todo su tiempo. Los recuerdos de su pasado reciente y de su infancia se entremezclan con las reflexiones sobre alguna de sus amistades presentes, así como de su observación sobre el transcurso del tiempo, un tiempo que parece igual, pero que no es el mismo