Me pongo triste cuando estoy contento y cuando me entristezco me alborozo. El sencillo secreto de mi gozo está en saber que es breve el sufrimiento. Siempre me ha desvelado un pensamiento: es frágil lo feliz, y lo penoso. El dolor es anuncio del reposo y así, cuanto más sufro, más me aliento. Cansancio es la promesa del descanso y del agua la sed es la promesa. Tortas, si falta el pan, habrá en la mesa. Tras la pena de amor, olvido alcanzo, mas la dicha que tengo de tenerte se mezcla con el miedo de perderte. Medellín, 2015 «La felicidad del triste», de Héctor Abad. Héctor Abad Faciolince (Medellín, 1958) prefiere publicar sus poemas con el nombre de Héctor Abad a secas, no por desprecio al apellido de su madre, sino porque cree que en prosa tiene una identidad distinta que en poesía. En su trayectoria como escritor Abad Faciolince ha publicado seis novelas, dos libros de cuentos y tres libros de ensayos. También ha sido editor, periodista, traductor y librero. Su obra más conocida es una biografía novelada de su padre: El olvido que seremos (Seix Barral, 2006). Su última novela es La Oculta (Alfaguara, 2014). Testamento involuntario es y será su único libro de poesía -aunque en cada edición se añaden o quitan poemas-. Actualmente Abad Faciolince es columnista del diario El Espectador de Bogotá y dirige la Biblioteca de la Universidad Eafit de Medellín.