Los muertos se han vuelto a levantar de sus tumbas y a pasear por las grandes ciudades del planeta. Pocos son los que han logrado sobrevivir utilizando los escasos recursos a su alcance. Un grupo de supervivientes ha logrado refugiarse en El Corte Inglés de Palma de Mallorca y fortificarlo, logrando tener a su disposición todos sus recursos, aunque las cosas no resultarán nada sencillas cuando los muertos vivientes comiencen a agruparse en masa alrededor del centro.