Hace muchos, muchos años, en el sudeste asiático nacieron unos animales peculiares que tenían poderes mágicos. Cuentan que allí por donde pasaban transformaban las sombras en luz porque contagiaban la alegría y la bondad de sus corazones a todos los seres vivos. Los jatakas narran las historias de estos animales ejemplares. Forman parte de la colección de obras que preservan los principios del budismo más primitivo. No pretenden dar lecciones, sino inspirar una conducta consciente y ética.