Florencio Hernández no se califica de escritor, sino de un lector que ha escrito el libro que quería haber leído. Ex futbolista del Barcelona, Se aficionó a la lectura en sus ratos libres. Fue un joven promesa, pero no cuajó en el Barça por una lesión crónica. Luego estuvo en el Levante y en el Castellón. Y a los veinticinco años optó por abandonar el fútbol por su lesión. Prefirió vivir que estar entre algodones para deambular por un campo de fútbol. No sabía exactamente lo que quería después de dejar el fútbol. Y ocurrió que una tarde entró en un bar, en Ciudadela, Menorca, de donde es originariamente. Y es ahí donde comienza la verdadera historia en la que se basa este libroà