Los vocabularios, aunque suelen parecer neutrales y desapasionados, son también portadores de tendencias, orientaciones e ideologías. Y este, debido a su peculiar hechura y sustancia, es un vibrante pregonero de lo que se dio en llamar La Otra psiquiatría. Esta denominación se usa para aludir a una minoritaria y peculiar forma de entender y practicar la clínica. No hay duda de su minoría numérica ni de su discreto ámbito de influencias. Pero quizá sí la haya en cuanto a su originalidad. En esta obra de psicopatología se estudian temas, no lo que Fulano o Mengano dice de tal o cual asunto.