Harry, un exmarine, y su mujer, Sasha, han dejado su ajetreada vida en la ciudad para marcharse a vivir de la tierra en un rancho en las montañas de Idaho. Su maravilloso nuevo hogar se halla alrededor de quince hectáreas de campo, álamos y bosques de pinos en el valle de Teton. Aunque sus amigos no comprenden este extraño cambio de vida, Harry y Sasha no pueden estar más emocionados del futuro que están construyendo juntos y sin ayuda de nadie. O al menos hasta que sus vecinos les advierten del espíritu que habita el valle. Uno que, dependiendo de la estación, acecha y cambia de aspecto. Aunque al principio crean que no se trata más que de una superstición local, conforme vayan pasando las estaciones, todo se volverá cada vez más peligroso y siniestro.