Este libro es una invitación audaz a derribar mitos y abrir la puerta a una mística cristiana que no es privilegio de unos pocos, sino un camino al alcance de todos. A partir de la relación con Jesús, nos invita a explorar dos dimensiones entrelazadas: lo extraordinario de figuras como Teresa de Ávila o Juan de la Cruz, y lo ordinario, vivido en la cotidianidad, en gestos sencillos que conectan lo trascendente con el mundo real.Sin limitarse a lo teórico, recorre lenguajes y prácticas de los grandes místicos, pero también reflexiona sobre cómo esta experiencia dialoga con la razón, con otras tradiciones religiosas y con los retos sociales y ecológicos de hoy. La mística, lejos de ser un escape, se muestra como un puente que integra el interior con el exterior, el silencio con la acción, el cielo con la tierra. Una llamada a vivir la fe como experiencia transformadora que ilumina y compromete.