«Era la época de la guerra. Cioran estaba en París. Escribió con grandes trazos 1941 en su manuscrito, que tituló Sobre Francia, pensando en los moralistas del siglo XVIII, tal vez presintiendo ya que un día sería uno de ellos. ¿Acaso no esbozó su retrato premonitorio cuando los comparó con los grandes creadores extranjeros? Extraño libro, éste. Aunque aparentemente dedicado a la decadencia de Francia, es en realidad un himno a ella. Cioran escribió, aún en rumano, pero en Francia, una oda a ella, amada incluso en su caída, que no podría carecer de grandeza, por lo muy grande que fue. ¿Eran Inglaterra, Alemania, la propia Rusia, más fuertes? Seguramente, pero su corazón latía por Francia. El Cioran nuevo llegó tan deprisa, tan bruscamente, que nos preguntamos qué misterio puede ocultarse tras esa fecha: 1941.» Alain Paruit