Los tratados de Bartolomé de las Casas son alegatos en favor de los indios, el más conocido de éstos, Brevísima relación de la destrucción de las Indias, no fue publicado hasta 1552. De las Casas se interesa por las condiciones de los habitantes autóctonos del Nuevo Mundo y describe sus maravillas. Así escribe, por ejemplo, sobre el tabaco: «son unas hierbas secas metidas en una cierta hoja, seca también, a manera de mosquete hecho de papel, de los que hacen los muchachos las pascua del Espíritu Santo, y, encendida por la una parte dél, por la otra chupan o sorben o reciben con el resuello para adentro aquel humo, con el cual adormecen las carnes y casi emborrachan». Junto a pasajes como el anterior, con apasionadas descripciones del Nuevo Mundo, Bartolomé de las Casas reflexiona sobre la Conquista y sus secuelas. Desde entonces el «genocidio» fue la idea de referencia a la hora de pensar en la experiencia americana.