Sefardíes repartidos por medio mundo han tenido la oportunidad histórica de obtener la nacionalidad española, debido a su condición de descendientes de los judíos expulsados por España en el siglo XV. Los testimonios de tres decenas de ellos constituyen la parte central de esta obra colectiva con la que Nagrela desea celebrar la Ley 12/2015. Antes de esos emotivos testimonios muchos de los cuales aportan una lección individual de diáspora y exilio, ofrecemos los antecedentes históricos sobre las maneras que ha tenido España de abordar su deuda con los sefardíes. Y, a continuación, hablan de la ley todos los representantes institucionales que participaron en su génesis, elaboración y aprobación. «¡Cuánto os hemos echado de menos! Con esta ley queremos expresaros que contamos con vosotros para caminar juntos, porque todos somos ciudadanos españoles, en la construcción de una España cada día mejor». Felipe VI «Soy sefardí, heredera de la nostalgia por la tierra de España que recibí de mi madre. Hablo la vieja lengua que los judeos se llevaron de Sefarad y que pasó de padres a hijos, hasta mi generación, durante casi quinientos años. Soy superviviente del horror de la Shoá. Ahora proclamo, por la memoria de mi madre, que con orgullo he vuelto a ser española. ¡Qué bonito es sentirse de nuevo en casa!» Annette Cabelli