Cuatro hombres comparten una estrecha celda subterránea en un centro de interrogatorio de Estambul. Para hacer el tiempo más soportable, comparten historias llenas de ternura y dolor, que giran siempre en torno a la ciudad que parece ignorarlos. Durante diez días se narran cuentos y experiencias personales, y se revelan también deseos y temores, anhelos de futuro y penas del pasado. Poco a poco convierten la ciudad en la protagonista real de la historia, en una parábola luminosa en la que conviven el sufrimiento y la ilusión, con todas sus contradicciones. La de Burhan Sönmez es una obra que no escatima recursos, incluido el humor, para relatar una tragedia. La novela es una carta de amor a Estambul, convertida en un palimpsesto cubierto tanto de sueños como de desesperación.