A partir de ciertas historias aparentemente desconectadas (el pasado familiar que atormenta a Mikel y su empeño por descubrir la realidad, un cadáver hallado a las orillas de la ría Nervión de Bilbao, el testigo al que le invade el pánico tras descubrir el cuerpo inerte, la madre que lucha por descubrir al asesino de su hijo o las cartas que la atemorizan), vemos un rompecabezas que mantiene en vilo al cuerpo de policía, con un giro inesperado que lleva a que la investigación se estanque. Un thriller diferente, donde la autora juega con la perspectiva del lector para conformar su historia.