Las direcciones de comunicación de las instituciones públicas han ganado peso en las dos últimas décadas, ocupan un lugar destacado en los organigramas institucionales y cada vez desempeñan un papel más crucial en la defensa de la imagen y la reputación de las instituciones. Este libro pretende analizar y demostrar el rol que tienen las direcciones de comunicación en el sector público en comparación con el privado, respecto a su grado de responsabilidad social y disponibilidad de recursos humanos y económicos. Consta de un capítulo teórico que muestra la evolución de estos departamentos hacia nuevos retos, y el relato de nueve casos de éxito profesional que dibujan un escenario de futuro y entusiasmo para las direcciones de comunicación en las instituciones públicas.