Dios nos llama a participar de su vida desde nuestro bautismo. Su Palabra es la luz que nos guía en nuestro caminar cristiano. Pero el camino es arduo y a veces podemos sentirnos desalentados. Hemos de volver a escuchar la voz de Dios para encontrar en su Palabra la fuerza que nos sostenga hasta llegar a compartir su gozo. Estas reflexiones prestan un servicio para que la Palabra nos fortalezca, sea que la leamos personal o comunitariamente, sea que busquemos prepararnos a compartir esa palabra en iglesia. "La palabra de la cruz es locura para los que van a la perdición, pero para los que van a la salvación, para nosotros, es fuerza de Diosö (1 Cor 1,18).