Carolina Coronado (Almendralejo, Badajoz, 1820-Lisboa, 1911) es una de las figuras más sugestivas del siglo XIX. Su éxito como escritora y su gran personalidad la hicieron ser el centro de atención en el mundo intelectual y social de su época. Una vida plagada de acontecimientos dolorosos y mágicos, desafíos a la muerte y su apasionado carácter trazaron, aún más, esa visión romántica y misteriosa que ella cultivó desde su coro de sombras. Esta segunda edición ampliada de Se va mi sombra, pero yo me quedo consta de treinta y ocho poemas y una introducción de Antonio Porpetta, donde puede leerse: «...venciendo al olvido, sobreviviendo al tiempo, dando fe de una voz y de una época, ahí están los poemas de Carolina Coronado, con su intacta frescura, su gran sensibilidad, su hondo y emocionado sentido poético».