En el presente libro que presentamos, tuvieron que pasar varios siglos para que el trabajo del economista irlandés Richard Cantillon obtuviera el reconocimiento merecido. Sería Murray Rothbard, en el contexto de la Escuela Austriaca de Economía, quien contribuiría decisivamente a erigirlo en una gran figura, hasta el punto de afirmar que era Cantillon, y no Adam Smith, el padre de la economía moderna.