Las madres de Ran y Shinichi aúnan fuerzas para resolver el caso de las amenazas contra el Señor Fujieda: Eri Kisaki intentando defender a su ex marido, y Yukiko en representación de su esposo, a quien el cuñado del señor Fujieda ha pedido ayuda. Pese a todo, el señor Fujieda es asesinado mientras ellos ven el crimen a través de las cámaras de vigilancia.