Un recorrido por la vida y la obra del pintor cretense (1541-1614) que, tras viajar por Italia, se asentó en Toledo y supo conjugar en su paleta el arte oriental bizantino de sus orígenes con la pintura italiana y española, aportando a esta última un misticismo que alarga las formas y que hace de sus retratos y composiciones obras atemporales. Una gran obra para disfrutar del arte y de la Historia.