Martina es una chica treintañera sin suerte en la búsquedadel amor perfecto hasta que su hermana decidetomar cartas en el asunto. Pero estamos en el siglo XXIy el amor ya no está en el aire, está en la red. Para encontrarlo,sólo hay que armarse de una buena dosis depaciencia, unas gotas de chispa y un ordenador con losmegas suficientes para que no se quede colgado en elmomento cumbre.Cuando el mundo virtual se convierte en realidad, Martinapensará que sus citas son como los cafés: a vecescargados, otras espesos, cortados o descafeinados.¿Encontrará el café perfecto, el que se sirve con un deliciosocroissant y zumo de naranja?