Definida por primera vez por Martin Seligman en 1999, la psicología positiva es un estudio científico de las fortalezas y virtudes humanas que pueden fomentar la motivación y la capacidad personal para alcanzar la meta de todo ser humano: la felicidad. Se trata de ampliar la perspectiva individual a través de una introspección en nuestras emociones, un trabajo personal que es posible aprender y entrenar.