«Hace unos días una estudiante vino a verme. Me pidió que preparara un doctorado sobre el tema siguiente: Crítica ideológica de la semiología. Me parece que en esta pequeña escena están presentes todos los elementos a partir de los cuales es posible esbozar la situación de la semiología y su historia reciente: Se encuentra en ella el proceso ideológico, es decir, político, al que se somete con frecuencia a la semiología... En segundo lugar, la idea de que aquel a quien esta estudiante se dirigía era uno de los representantes de esta semiología... Por último, la intuición de que, en el papel de semiólogo semioficial que ella me atribuía, subsistía cierta vibración, cierta duplicidad...: de ahí esa especie de leve amistosidad que esta escena, llena de coquetería intelectual, me ha dejado en el recuerdo.» Roland Barthes