En Juan Carlos, un rey con antecedentes, Iñaki Errazkin se sumerge en las hemerotecas, en los bancos, en las petromonarquías del golfo Pérsico, en el árbol genealógico de los Borbones, en los servicios secretos, alcantarillas del Estado y amistades de infancia de Juan Carlos I –y aun en las alcobas– con un claro propósito: poner de manifiesto las actividades irregulares –cuando no delictivas– que Juan Carlos Alfonso Víctor María de Borbón y Borbón-Dos Sicilias, sucesor de un dictador y amparado durante casi cuarenta años por una Constitución hecha a su medida, ha cometido con total impunidad. Deslealtades, traiciones, relaciones adúlteras, violencia doméstica, responsabilidades paternas incumplidas, muertes, negocios turbios, comisiones ilegales, expolios, amistades indeseables y conspiraciones transitan por las páginas de este minucioso trabajo periodístico que deja al descubierto todo un universo de corrupción real y de podredumbre política.