En nombre de la productividad se busca optimizar el tiempo para hacer más cosas. Sin embargo, la eficacia tiene en cuenta otros aspectos, como la necesidad de hacer menos cosas para obtener mejores resultados. Frente a la productividad desaforada, el autor promueve la dedicación consciente a nuestras responsabilidades. Este libro sobre el teletrabajo, la autoorganización y el liderazgo de equipos no está orientado a aumentar tu productividad, sino tu eficacia. Si ya tienes un puesto de liderazgo y has llegado al libro con la intención de mejorar en tus responsabilidades, este es un buen sitio. El primer consejo es que no te olvides de que, si estás en una posición de liderazgo, probablemente es por una cuestión de suerte, aunque no lo creas. Así que evita narrativas de superioridad y meritocracia. Por otro lado, si aún no estas en una posición de liderazgo y has llegado aquí para tratar de conseguirlo, este libro te ayudará y te recordará que para liderar a los demás, antes que a nadie, has de aprender a liderarte a ti mismo. El presente volumen está lleno de herramientas para teletrabajar y organizarte de manera satisfactoria. No encontrarás en él la receta exacta para el liderazgo ni fórmulas que seguir a pie juntillas para alcanzar el éxito, porque no existen. El libro está repleto de sugerencias, de preguntas que te harán pesar, experiencias y ejemplos prácticos con los que podrás dirigir tu atención hacia las áreas que más importan: las necesidades de tu equipo, las del contexto y las tuyas propias. Ten por seguro que no te dejará indiferente.