Alan W. Watts (1915-1973) fue probablemente el occidental que más y mejor estudió las filosofías orientales, y en particular el pensamiento Zen, al que dedicó un primer libro en fecha tan temprana como 1935 (El espíritu del Zen). Sin embargo, fue en la década de los cincuenta y sobre todo en la siguiente, cuando sus obras se convirtieron en libros de cabecera para miles de lectores británicos y estadounidenses, y a partir de ese momento fue traducido a todas las lenguas conocidas. El fenómeno puede fecharse con más precisión en 1957, año en que apareció El camino del Zen.