Esta novela es un capítulo imprescindible en la historia de la novelística contemporánea, el punto más alto de la stream of consciousness woolfiana, donde se hacen patentes las proximidades y diferencias respecto de Faulkner y Joyce. La más célebre traducción, además, de Carmen Martín Gaite. Durante una excursió a un faro, los miembros de la familia Ramsay se muestran al lector en toda su complejidad y se presentan eredados en una trama de sentimientos cruzados y contradictorios en la que la figura paterna ocupa un lugar central pero problemático (objeto especialmente del rencor del hijo).