Esta obra autoría colectiva gira en torno a la producción arquitectónica de Diego de Riaño y Diego Siloé, dos grandes maestros del siglo XVI español nacidos en el norte peninsular, cuyas obras quedaron diseminadas por los antiguos reinos de Sevilla y Granada, focos fundamentales de la transición del Renacimiento en la España del emperador Carlos V. En el contexto de la gran transformación experimentada por la arquitectura española en las primeras décadas del XVI, Riaño y Siloé encarnan dos modos muy diferentes de incorporar las novedades procedentes de Italia y de ofrecer respuestas a las nuevas circunstancias y exigencias.