Las minas y la siderurgia protagonizaron la industrialización que arrancó en el País Vasco a finales del XIX, pero diversas actividades jugaron un papel relevante en esta evolución. Este libro estudia una variada gama de negocios que se desenvolvieron desde mediados de siglo en torno a Bilbao. Importadores de maderas, de coloniales, comerciantes en productos alimenticios o farmacéuticos, entre otras actividades, conformaron ámbitos burgueses con influencia nítida en el desarrollo urbano y en la modernización institucional de la economía vizcaína. Analiza también la estructura de la industria siderúrgica en España a comienzos del XX y la que adoptó en el País Vasco. Aborda algunas problemáticas que resultaron decisivas en este proceso. Las precarias condiciones del puerto bilbaíno y la forma que se afrontaron resultaron cruciales en el despegue económico. De otro lado, la diversidad empresarial generó distintas posiciones sobre la cuestión arancelaria, si bien se impuso el proteccionismo promovido por los empresarios siderúrgicos.