Tanto en la tradición griega como en el Antiguo Testamento, «pecado» significaba desviarse de la dirección correcta. La gula, en este contexto, sería una desviación de la manera correcta de comer y, consecuentemente, para poder hablar con propiedad de la gula, antes se ha de conocer en qué consiste ese modo correcto de alimentarse. Este libro se apoya en la tradición literaria -desde los líricos griegos arcaicos hasta los poetas malditos, pasando por la Biblia y las novelas de caballería- para entender el modo en que se ha interpretado ese buen comer bueno en Occidente y cómo, en muchas ocasiones, no se ha formulado como una mera prohibición, sino como la búsqueda de un equilibrio.