Este libro contiene las memorias del Arzobispo Francisco-Javier Lozano, nuncio apostólico en diversos países. El tiempo y la memoria son protagonistas de esta vida concreta, con sus altibajos, sus pecados y sus virtudes;sus verdades en la nebulosa de los recuerdos de lo que fue y lo que pudo ser. Me remito fundamentalmente -dice el autor-a fechas y eventos de los que fui testigo o protagonista. Me apoyo en el recuerdo, en la memoria, para dejar rastro de mí en escritos dispares, variados y desiguales a golpe de ordenador y tecnología. Se escribe porque no se quiere morir. Se emborronan páginas como gritos de vida. Se dice lo que se sabe -y lo que se inventa- para que la ceniza no tenga la última palabra, para que se sepa que se ha pasado por aquí, que se han dejado huellas de vida, aunque nadie te haya llamado «marido» ni «papá».