Anselm Grün reconoce: "Soy sacerdote por vocación, pero me pregunto por el significado actual del sacerdocio, por lo que esta opción de vida lleva consigo". Para responder a esta cuestión se remonta en primer lugar a las imágenes arcaicas, tomadas de las religiones, y traza después una imagen positiva del sacerdote como introductor y guía en el camino del encuentro consigo mismo. Es un libro que anima a decidirse por el seguimiento de Cristo, en el que todos los cristianos se pueden inspirar, pues todos participan del sacerdocio de Jesús.