La educación intercultural es el gran reto de la sociedad del siglo XXI. El contenido de este libro está pensado para que la teoría y la práctica de la educación intercultural estén íntimamente ligadas, de tal manera que permita no sólo reflexionar sobre el tema sino también, y fundamentalmente, actuar. El libro aborda algunas consecuencias de la inmigración, referidas tanto al mercado de trabajo y la economía como a sus consecuencias en el aspecto más humano, entroncado con los derechos de ciudadanía, el racismo y sus diversas manifestaciones. Se argumenta cómo la educación intercultural constituye un medio fundamental para desarrollar valores democráticos. De la misma manera, se hace un somero análisis del concepto y los tipos de mediación, la figura del mediador y las circunstancias que han hecho surgir la necesidad de la mediación intercultural: qué significa y su conexión con el sistema educativo, incluyendo estrategias de mediación que han demostrado ser altamente eficaces, además de numerosos ejemplos muy didácticos y clarificadores y pautas concretas para fomentar el diálogo intercultural. La segunda parte del libro, la más práctica, se centra en las estrategias de trabajo colaborativo e incluye gran cantidad de ejemplos para construir grupo, fomentar los procesos de comunicación, analizar la realidad, detectar problemas y necesidades, plantear juntos posibles soluciones y evaluar que han sido refrendados por la experiencia.