El libro muestra la fecundidad de la alianza entre la Universidad y marginalizados, entre los llamados tercer y cuarto mundos. Desde la experiencia concreta de un proyecto de inserción comunitaria con raíces en la comunidad universitaria, aborda los rostros de los excluidos, las estrategias operativas que posibilitan aprender al tiempo que se actúa, y la aproximación al debate universitario que reclama la colaboración de todas las instancias sociales y preocupa a los agentes políticos y educativos.