Esta obra es una auténtica e innovadora «Summa logicae». Lo que empezó como un proyecto de redacción de un manual, tras varios años de trabajo, ha terminado siendo un tratado novedoso de gran calado filosófico. Si bien presenta de una forma clara, amena y ordenada ―que agradecerán los estudiantes― la lógica del concepto, del juicio y del razonamiento, la lógica de enunciados, predicados y clases o la logística no clásica, terminando con una cumplida explicación de la metalógica, no se trata de una mera obra expositiva. Sorprende el autor con una aportación original y radical en el panorama filosófico, pues no se refiere a la lógica al modo aristotélico, como mera ciencia auxiliar y propedéutica, sino que sitúa la Ciencia del Logos en el corazón de la filosofía, como privilegiado acceso al problema del conocimiento y del ser. La articulación entre lógica, en este sentido radical, con la gnoseología y la ontología late en cada página. Y desde esta articulación, hecha en clave realista, dialoga con originalidad y hondura con la filosofía de la ciencia, con la hermenéutica o la lingüística. Además, ofrece esta obra otra virtualidad más profunda, original del autor: la apertura del logos al Logos, la lógica como dintel de entrada firme y seguro al problema filosófico de Dios.