Ni la lingüística ni, ciertamente, el propio lenguaje están al margen de las tensiones sociopolíticas del presente. En este nuevo libro, con su rigor y claridad habituales, Enrique Bernárdez revisa nuestro concepto del lenguaje y sostiene, contra el aislacionismo que ha caracterizado a la lingüística durante décadas, su entronque con otras facetas de la existencia humana, en particular con la cultura. Asimismo, analiza el discurso sobre el lenguaje, desde las ideas preconcebidas y las manipulaciones hasta la trivialización que con demasiada frecuencia nos transmiten los medios de comunicación y el discurso oficial. Sus críticas e interrogantes buscan hacernos pensar de nuevo, no sólo a los lingüistas sino a los usuarios del lenguaje en general, fenómenos como la corrección lingüística, la capacidad de engañarnos del lenguaje o la presunta universalidad de determinados conceptos.