Tanto si lo sabemos como si no, nos convertimos en químicos siempre que entramos en la cocina. Cuando cocinamos, supervisamos complejas transformaciones químicas que pondrían a prueba al más experimentado de los químicos profesionales. Al centrarse en cómo y por qué cocinamos distintos platos de la forma en que lo hacemos, este libro nos presenta una química básica a través de los alimentos y los platos que preparamos a diario. Mediante una organización particular producto a producto, el libro explora de manera divertida la química que convierte nuestros alimentos en platos para comer. Los temas tratados van desde el tostado de los granos de café hasta los huevos revueltos y el desarrollo del gluten del pan. El libro presenta muchos experimentos que podemos probar en nuestra propia cocina, como las propiedades fundentes del queso, la conservación del sabor cuando se cocina y el maridaje de los vinos y los alimentos.