Esta obra, inscripta dentro de la producción de textos del Círculo de Bajtín, abre la reflexión sobre el lenguaje y su uso bajo una interpretación ligada a la doctrina filosófica marxista. De esta manera, aborda el estudio de las ideologías y la filosofía del lenguaje a partir del problema de la relación entre las bases y las superestructuras. Para ello, Volóshinov revisita diversas corrientes del pensamiento filosófico lingüístico y revisa los conceptos de lengua, lenguaje y enunciado.