En este libro, el famoso historiador británico E. P. Thompson cuestiona las posiciones teóricas de Louis Althusser y el marxismo estructuralista. Para Thompson, la concepción estructuralista de la historia de Althusser, como un "proceso sin sujeto", no solo condenaba al olvido la experiencia concreta de empoderamiento colectivo de los sectores subalternos, sino que además concede un nuevo aliento teórico al estalinismo ideológico que, en su opinión, seguía atravesando las tesis y la práctica del Partido Comunista francés.