Con más de treinta años de experiencia como especialista en psicología clínica, Miguel Ángel Rizaldos nos explica que ser frágiles no debe ser motivo de sufrimiento, sino todo lo contrario: si nos lo proponemos, podemos hacer de la vulnerabilidad una de nuestras principales aliadas. Aunque con frecuencia vivimos emociones positivas y negativas, solo si nos exploramos y las hacemos nuestras descubriremos las fuentes de nuestro bienestar. A partir de un lenguaje cercano y práctico, y con el respaldo científico de la psicología y la neurociencia, las páginas de ¿Ser frágil es malo nos muestran los conceptos clave alrededor de la fragilidad y nos brindan las herramientas para transformarla en un rasgo positivo de nuestro carácter. Si entendemos las razones de nuestros pensamientos, sentimientos y actitudes frágiles, cada día estaremos más cerca de aceptarnos, conocernos y querernos.