Duchazeau nos arrastra a través de este road comic a lo más profundo del delta del Misisipi: polvorientas carreteras, el tintineo de una botella y, siempre, una guitarra acústica. Hemos llegado al corazón del blues. Nuestro hombre, Robert Johnson, vaga de pueblo en pueblo cargando con un pesar demasiado hondo: el abandono de un padre, una infancia pasada en los campos de algodón bajo la vigilancia de un padrastro abusivo, la muerte del amor de su vida y de su hijo en el parto... Parece que a medida que pasa el tiempo hay una única relación íntima que permanece: la que tiene con la música del diablo. Este maravilloso libro es un acercamiento vibrante al surgimiento del blues, al contexto del sur rural de los Estados Unidos de la Gran Depresión y, por supuesto, a la vida y la muerte del que muchos han llamado «el primer bluesman».