En el cuarto y último volumen de Pies descalzos, Gen y sus amigos no se dejan vencer por las circunstancias y están a punto de forjarse un futuro mejor. En el último volumen de Pies descalzos descubrimos a un Gen más maduro y fuerte. Con él compartimos algunas alegrías: recupera a su hermano Koiji;descubre que su gran pasión es la pintura;los éxitos compartidos con los diseños de Natsue y Katsuko;o cuando descubre el amor junto a Mitsuko. No obstante, también sufriremos con él cuando sienta impotencia ante la guerra contra Corea y la amenaza por parte del ejército estadounidense;cuando pierda su casa, el hogar de sus padres y lo último que le queda de su familia;o cuando empiece a ser consciente de que la bomba todavía sigue cobrándose vidas. Desde el día de la tragedia han aumentado los casos de cáncer y otras enfermedades terminales, y todo apunta a que la siguiente víctima será Natsue.