La arquitectura de RamónVázquez Molezún no obedece a discursos teóricos y debe ser descubierta desde otros campos, analizando su método y herramientas de trabajo, destacando su destreza como artesano y constructor, sus notables cualidades como dibujante y pintor, o su constante referencia a la escala y a la geometría, siempre presentes en sus trabajos.Estos paisajes van más allá de los que inspiraban sus proyectos o perfilaban sus cuadros, son paisajes vitales, creados por experiencias, vivencias, relaciones personales y profesionales. Ramón estuvo toda su vida persiguiendo y buscando nuevos escenarios, que le permitieran seguir aprendiendo y avanzando, sin temor, con valentía y con unas insaciables ganas de descubrir.El relato que aquí se presenta es una biografía contada en dibujos, fotografías y planos, que combina lo personal, lo artístico y lo arquitectónico como partes de una unidad indisociable. Se invita al espectador a visualizar la exposición a través de un recorrido gráfico, una sucesión de cinco capítulos, denominados «paisajes», que alu