Hallstatt, Austria 1972. Un lugar idílico, un pueblo de postal al pie de los Alpes donde la gente ni siquiera se preocupa de cerrar su casa con llave. Los días se suceden sin el menor sobresalto y sin que nadie presagie lo que está a punto de suceder: Farel, un carismático policía retirado, desaparece dejando perplejos a su hija Lara y al resto de vecinos. El miedo se cala entonces por las húmedas callejuelas de piedra y madera y ya nadie se fía de nadie. Cuando Lara trata de averiguar el destino de su padre, se sorprende de cómo nunca nada había sido lo que parecía.