¡Qué diversas y preciosas son las palabras! Teo ha caído en la cuenta de la importancia que tiene dar la palabra a otra persona. ¡Tiene el compromiso de cumplir lo acordado! Porque lo dicho, dicho. A Teo no le gusta quedar por mentiroso y, como en boca cerrada no entran moscas, cavila antes de meterse en jardines.