¿Son siete besos suficientes para conseguir que el chico que le gusta se enamore de ella? Paula sabe que está mal, que no debería habérselos pedido, porque Alex es mayor que ella tres años y es, además, el novio de su prima. Sin embargo, con catorce años, es incapaz de renunciar a la oportunidad que se le ha presentado gracias a un giro del destino, y Paula buscará sus siete besos aunque sepa que el verano no puede terminar bienà como así ocurre. Años después, un Alex adulto se reencontrará con esa chiquilla que lo atormentó y lo persiguió siendo adolescentes, y descubrirá que ella también es otra Paula, mucho más crecida y mucho másà mujer. Entre ellos flotan los fantasmas de esos siete besos que marcaron un verano para olvidar.