Concha Méndez (Madrid, 1898-Ciudad de México, 1986). Aunque siempre negó ser feminista, esta poeta y dramaturga viene figurando como una de las grandes mujeres españolas que en los años veinte del siglo pasado abrieron el camino para el movimiento feminista que actualmente se vive en España. Su lucha por liberarse de las rígidas normas de la sociedad en la que le tocó nacer resulta, en efecto, admirable. Sin embargo, la historia de su emancipación personal no debería hacernos olvidar la importancia de su obra literaria: porque la creación artística fue lo que finalmente le dio sentido a su vida, pero sobre todo porque en ella la escritora nos legó la historia más íntima de cuanto había vivido. En esta pequeña antología poética se recogen poemas suyos que corresponden a las distintas etapas de su larga carrera, desde los tiempos de sus primeras colecciones vanguardistas Inquietudes (1926) y Surtidor (1928) hasta los últimos versos póstumos de Con el alma en vilo (2008), pasando por poemarios de la guerra civil y del exilio como Lluvias enlazadas (1939) y Poemas. Sombras y sueños (1944).