Este libro es la recopilación de las crónicas que Carmen Laforet escribió contando su largo periplo por Estados Unidos en 1965, invitada por el Departamento de Estado. Como explica ella misma en el epílogo, «De las notas tomadas en trenes y habitaciones de hotel surgió este libro. De la primera impresión fresca y viva con paisajes y personas y ambientes desconocidos...». El resultado es un texto delicioso en el que describe, sin más pretensiones, lo que observa con ojos de viajera. Confiamos en que, como comenta Agustín Cerezales Laforet en el prólogo, «Sesenta años después, muchas cosas han cambiado en el mundo. Otras, para bien y para mal, no tanto. Los norteamericanos y los españoles de hoy, al leer este libro, puede que aprendamos algo sobre nosotros mismos».